ERRORES FRECUENTES EN UNA REFORMA INTEGRAL
Si tienes en mente hacer una reforma en tu vivienda y deseas que el resultado final sea tal y como siempre has soñado, es importante evitar algunos de los fallos más habituales que se comenten en esos momentos. Y es que, si lanzarse a la aventura de comprar una casa ya es una auténtica proeza, realizar una reforma integral es prácticamente una misión imposible.
De hecho, son muy pocos los testimonios que califican esta experiencia como algo positivo. Frente a estos, aparecen infinidad de anécdotas referentes a las pésimas decisiones tomadas durante la ejecución de la obra. Hoy vamos a hablar sobre algunos de los errores más normales para intentar evitarlos en la medida de lo posible.
ÍNDICE DEL ARTICULO
Error n.º 1. No ceñirse al presupuesto real
El primer error que se suele cometer en una reforma integral es el de no tener en cuenta hasta el más mínimo gasto. Es fundamental tener en cuenta desde las partidas más grandes hasta las más insignificantes como pueden ser los picaportes de las puertas o las luces de las lámparas.
De igual manera, es muy
habitual aceptar modificaciones sobre el presupuesto original sin haber concretado el dinero que ello va a conllevar.
Suelen ser cambios pequeños pero que si se van sumando, consiguen multiplicar el importe inicial.
Error n.º 2. No contar con imprevistos que, casi con seguridad, suceden
Según Alba V. Codesido, la fundadora del estudio de diseño y arquitectura Basamenta, señala que uno de los imprevistos más habituales con los que es posible encontrarse al hacer una reforma integral, especialmente en viviendas antiguas, son los desniveles en las paredes y techos.
También es necesario predecir unas tuberías que se pueden romper cuando se cambian los azulejos. De hecho, más vale prevenir que curar e invertir entre un 10% y un 20% más en el presupuesto, te permitirá descansar mejor durante todo el proceso
Error n.º 3. No contar con un buen arquitecto
Alejandro Jiménza, arquitecto opina que seguramente, este es el peor error que se puede cometer si no quieres que la reforma integral de tu hogar se convierta en una auténtica pesadilla. Aunque muchas personas piensan que los arquitectos tienen unos honorarios muy caros y que contratar uno va a suponer una incremento importante en el presupuesto, lo cierto es que no es así.
Con ayuda de un buen profesional, conseguirás que todo el hogar que siempre has soñado se haga realidad sin sustos inesperados.
Error n.º 4. No avisar a tus vecinos
Las obras no agradan a nadie, y menos si se realizan en una comunidad de vecinos. Para evitar tener problemas mayores durante una reforma integral, es necesario tener en cuenta algunas medidas legales y tener en cuenta otras éticas y morales. Por ejemplo, es necesario contar con los permisos necesarios para poder realizar la obra necesaria. En principio, no hay que pedir permiso a la comunidad siempre que las obras no alteren la seguridad o estructura del edificio.
Lo que sí se recomienda es hablar con el administrador o presidente para informarle sobre tu proyecto. Sin duda, una manera amigable de comenzar la reforma y que te evitará problemas.
En lo que a la convivencia se refiere, es necesario que se cumplan los horarios de ejecución de obras para evitar las molestias provocadas por los ruidos. De esta manera, los trabajos de cualquier reforma integral solamente se podrán realizar desde las 8 de la mañana hasta las 20 horas de la noche y en días laborables. El incumplimiento de dichos horarios podrán acarrear quejas por parte de los vecinos.
Error n.º 5. No contar con la actual distribución
En el momento en que se cambia la distribución de la vivienda al llevar a cabo una reforma integral, se pueden ver afectadas las instalaciones de las mismas, tales como el suministro de agua, de ventilación o del gas. No todos los espacios sirven para la evacuación correcta de los humos de combustión. De la misma forma, tampoco puede sacarse un baño del lugar en el que se encuentra. Por eso, es tan importante estudiar muy bien cada uno de los aspectos.
Si se trata de una casa antigua, es bastante común que haya un muro de carga con algún pilar o con vigas de madera. Todo el mundo cree que se pueden tirar sin problema durante una reforma integral, cuando en realidad son normalmente los que dan resistencia a la vivienda. Si es necesario hacerlo, el proyecto pasará a convertirse en una obra mayor y en estos casos resulta obligatorio contratar a un profesional, es decir, a un arquitecto.
El mismo se encargará de hacer los cálculos necesarios y de aportar la solución técnica para que no se produzca ningún problema en la seguridad, tanto de la casa como del edificio completo. En estos casos, el proyecto deberá ir firmado por él y visado posteriormente por el Colegio de Arquitectos. El primero se va a hacer responsable durante los próximos diez años del trabajo realizado gracias a un seguro que habrá que contratar para mayor tranquilidad.
Error n.º 6. No elegir los materiales adecuados
Todas las viviendas son distintas y tienen unas características diferentes. En base a esto se deben emplear unos materiales u otros para la reforma integral. Por eso, se deben conocer aquellos materiales que van a ir bien en cada una de las estancias. En el suelo es importante que el material usado tenga durabilidad y que pueda limpiarse y mantenerse perfectamente a lo largo del tiempo.
También influye su posible reciclado, así como el precio y desde luego, la facilidad de su colocación. Antes de elegirlo, es importante que tengas muy claro que es lo que quieres conseguir con un nuevo suelo. Más luz, comodidad, modernidad… Si sabes lo que buscas, te va a resultar más sencillo acertar con las tonalidades y el material.
Tener en cuenta el color es algo primordial. Un suelo claro va a dar mayor amplitud, mientras que uno más oscuro otorgará mayor calidez al espacio. Si optas por uno con muchas juntas y textura, a la hora de limpiarlo tendrás más dificultades. En el caso de que tengas niños, no lo dudes y decídete por uno que sea laminado. Es mucho más sufrido, resistente y va a aguantar mucho mejor el trote de los pequeños. Si resides en una zona fría, no hay nada mejor que la madera. Por el contrario, si es un área calurosa, la cerámica o la piedra van a ser tus mejores aliados.
Error n.º 7. No contar con los criterios deseados para una vivienda saludable
Ya sea una obra que se empieza desde cero o no, los criterios que se deben seguir para lograr una vivienda que sea saludable pueden marcarse desde el principio. Especialmente cuando se trata de una reforma integral. La orientación y la luz natural son fundamentales para vivir. No en vano, se pasan muchas horas en el interior de los edificios por lo que las horas que se pasa a la luz del sol se ven muy reducidas. Esto puede conllevar un empeoramiento de la salud.
Las terrazas y los espacios exteriores van a convertirse en los mejores aliados para captar la radiación solar. De ahí la importancia de contar con la mayor cantidad de espacios disponibles que permitan la entrada de la luz natural.
De la misma manera, se debe tener en cuenta el aislamiento acústico durante tu reforma integral. Este te va a proteger de los ruidos exteriores que pueden llegar a resultar verdaderamente molestos.
¿Quién no ha intentado descansar o ver una película tranquilamente y los ruidos del exterior se lo han impedido? Para evitarlo y que nada perturbe tu tranquilidad, se puede recurrir a distintas soluciones. Eso sí, hay que tener claro que el ruido no se va a poder eliminar completamente, pero se pueden amortiguar las vibraciones que el mismo produce gracias a la insonorización de cualquier espacio.
Para lograrlo hay que localizar de dónde va a proceder el ruido. Dependiendo de dónde provenga, se pueden elegir unas soluciones u otras. Si no quieres recurrir a una obra muy complicada, es posible usar materiales aislantes como la lana de roca, la fibra de vidrio o el vidrio celular entre otros. Si lo que pretendes en contar con unas ventanas lo más insonorizadas posibles, hay que tener encuentra la forma de su apertura. En este caso, lo más aconsejable es elegir un sistema practicable en vez del sistema tradicional de corredera.
Error n.º8 No guardarse los contratos de garantía y las facturas de obra
Seguro que vas a solicitar numerosos presupuestos y que vas a encontrar importantes descuentos en cosas tan esenciales como los electrodomésticos. Pero recuerda que esto puede ser una ventaja solamente a medias. No en vano, no vas a poder probarlos hasta que no los hayas recibido y que pueden llegar erróneos o defectuosos debido al desplazamiento que en todo caso, van a ejecutar terceras personas.
Por eso, si necesitas realizar cualquier cambio o hacer una reclamación, vas a necesitar el ticket de compra o la factura. No olvides tampoco hacer una fotografía tanto del producto que hayas adquirido como el embalaje en el que lo has recibido antes de ponerlo en marcha. Siempre tendrás que probarlo durante el período de garantía, de lo contrario, te resultará mucho más complicado hacer el cambio.
En definitiva, los criterios que se han expuesto son algunos de los más destacables para evitar que tu reforma se convierta en una experiencia “traumática”. Como publicó El País en su artículo “